462
intervenciones de imaginología utilizadas durante la cirugía
incluyeron imaginología de resonancia magnética (IRMi)
durante la cirugía para evaluar la cantidad de tumor restante,
o un colorante fluorescente (ácido 5-aminolevulínico [5-ALA])
para distinguir el tumor. Dos ensayos utilizaron imagino-
logía preoperatoria para identificar la ubicación del tumor,
que luego se usó en el momento de la cirugía para guiar la
resección (neuronavegación). Todos los estudios estuvieron en
riesgo significativo de sesgo y algunos fueron pequeños y se
interrumpieron de forma temprana. Otros fueron financiados
por los fabricantes de la herramienta de guía por imágenes
utilizada.
Resultados clave
Se encontraron pruebas de muy baja calidad de que el uso de
cirugía guiada por imágenes puede dar lugar a la extracción de
una cantidad mayor del tumor de forma quirúrgica en algunos
pacientes. No se ha demostrado que alguna de las técnicas
evaluadas mejore la supervivencia general. Los datos acerca
de la forma en que cada técnica puede afectar la calidad de
vida del paciente no se informaron de manera adecuada. Los
efectos secundarios de cada técnica tampoco se informaron de
manera adecuada, aunque no parecieron ser más frecuentes
con la cirugía guiada por imágenes. Hay inquietudes en cuanto
a que la extracción de una cantidad mayor del tumor mediante
5-ALA pueda dar lugar a que los pacientes sufran un tipo de
accidente cerebrovascular poco después de la cirugía aunque a
largo plazo el riesgo parece no ser diferente entre las técnicas.
Hubo pruebas de calidad muy baja sobre la neuronavegación
y no se identificó ningún ensayo sobre la guía con ecografía.
Calidad de la evidencia
Las pruebas sobre la cirugía guiada por imágenes para extraer
los tumores cerebrales son escasas y de baja calidad. Se nece-
sita más investigación para evaluar dos cuestiones principales.
1.
¿La extracción de más cantidad del tumor es mejor para el
paciente a largo plazo?
2.
¿Cuáles son los riesgos de causar que empeoren los síntomas
del paciente al extirpar más cantidad del tumor, y cómo lo
anterior puede afectar la calidad de vida del paciente?
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2017; 28(3) 460-462]