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[Trastornos del sueño en la adolescencia - Dra. Francesca Solari B.]
Consecuencias de la privación de sueño crónica
Una de las principales consecuencias de la privación de sueño es la tasa
de accidentabilidad. En conductores menores de 25 años causa el 50%
de los accidentes automovilísticos.
Privación de sueño en la juventud lleva a:
•
Elevar los niveles de cortisol
•
Alteración de la homoestasis de la glucosa (obesidad y diabetes tipo 2
precoz)
•
Menor control de emociones y aumento de las conductas ansiosas o
depresivas
•
Bajo rendimiento académico y baja capacidad de memoria
•
Ánimo negativo
•
Síntomas tipo similares al déficit atencional
•
Aumento en el abuso de nicotina, cafeína, alcohol y otras sustancias
Insomnio
Diferentes estudios ha encontrado una alta prevalencia de insomnio
tanto en niños sanos como en niños con comorbilidad psiquiátrica,
como ansiedad, depresión y desórdenes del espectro autista. Esto hace
necesario entender la causa y naturaleza de los factores que producen
insomnio para manejarlo mejor (5,6).
La principal característica de esta alteración consiste en una persistente
dificultad en la iniciación, duración o calidad del sueño. Para poder
hablar de insomnio el paciente debe presentar las siguientes situaciones:
A.
El síntoma predominante es la dificultad para iniciar o
mantener el sueño, o la falta de sueño reparador
(sueño
aparentemente adecuado en cantidad, pero que deja al sujeto con la
sensación de no haber descansado).
B.
La alteración se presenta por lo menos tres veces a la
semana durante un mes
y es lo suficientemente grave como para dar
lugar a cansancio diurno o a la observación por parte de los demás, de
otros síntomas atribuibles a una alteración del sueño, como irritabilidad
o deterioro de la actividad diurna.
C.
El trastorno no aparece solamente en el curso de un
trastorno del ritmo sueño/vigilia o de una parasomnia.
Hay tres tipos básicos de insomnio, basado en la duración de los
síntomas, crónico, de corta duración y otros, o subdividido en la causa
del insomnio, diferenciándolos en idiopáticos, afectivo (Ansiedad,
aprendido o por mal hábito (cambios ambientales y de fase) y secundario
a comorbilidad médica o psiquiátrica. En este último subtipo hay que
descartar:
Otras posibles causas del insomnio pueden ser:
•
Dolor o malestar
•
Factores dietéticos
•
Efectos medicamentosos directos
•
Efectos de la retirada de fármacos
•
Disfunción tiroidea
•
Lesiones del tallo cerebral e hipotalámicas
•
Depresión
Los puntos clave del tratamiento del insomnio incluyen:
•
Hábitos pre-sueño que interfieren con la transición vigilia/sueño y el
inicio del sueño
•
Creencias erróneas asociadas con el sueño
•
Despertares patológicos asociados con la estadía en cama
•
Otras conductas negativas que afectan la continuidad del sueño y las
funciones del día a día en el adolescente
Existen diversos cuestionarios para niños o adultos que permiten medir
la calidad del sueño, los cuales se pueden utilizar en una consulta. Sin
embargo, llevar y completar un calendario o diario de sueño por una o
dos semanas aporta y objetiviza el real trastorno de sueño. Siempre es
necesario investigar las causas secundarias y sólo su adecuado manejo,
mejorará el trastorno de sueño.
El manejo de las rutinas y rituales previos al acostarse son fundamentales
para una buena transición entre la vigilia y el sueño, al igual que la
educación y realización de una higiene adecuada de sueño. El uso de
fármacos es menor y actualmente la melatonina solo tiene su indicación
en aquellos insomnios de conciliación y permite hacer el período de
transición menor (2,7).
Síndrome de Fase Retrasada del Sueño
El Síndrome de Fase Retardada es un desorden prevalente en los
adolescentes (1,7% en la población general y un 7% de los pacientes
con insomnio), que está inserto dentro de las alteraciones del ritmo
circadiano. Requiere de tratamiento, ya que en los niños genera
consecuencias en el área afectiva, académica y alteraciones en la
conducta. El diagnóstico incluye monitoreo (actígrafo, diario) y una
detallada historia de sueño. Es un desorden común en adolescentes
que lleva a ausentismo escolar. La causa no es clara, pero habría cierta
predisposición genética. Polisomnografía, actígrafo y cuestionarios de
sueño, pueden ofrecer información adicional.
Solicitar al paciente que complete un calendario de sueño durante una
semana puede proveer evidencia de:
1.
Retraso en la hora de sueño estable, en conflicto con las normas
sociales (días de colegio)
2.
Sueño normal cuando están libres de obligaciones sociales (fines de
semana)
3.
Se asocia a insomnio de conciliación
Este calendario no entrega el dato de la somnolencia diurna, por lo cual
debiera ser insertado.
El tratamiento involucra cronoterapia, retrasando cada día la hora
de acostarse hasta que se vuelve a coincidir con el horario deseado;
luminoterapia (10,000 lux fuentes de luz); estricta higiene del sueño y
administración de melatonina. El último recurso es el trabajo conjunto
con el sistema escolar. Una vez logrados los horarios adecuados, son
imprescindibles rutinas sociales estrictas y hábitos de sueño.