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Objetivo primario
Determinar los efectos de la reducción del ruido en los resul-
tados de crecimiento y desarrollo nervioso a largo plazo en los
lactantes.
Objetivos secundarios
1. Evaluar los efectos de la reducción del ruido sobre resultados
médicos a corto plazo (displasia broncopulmonar, hemorragia
intraventricular, leucomalacia periventricular, retinopatía del
prematuro).
2. Evaluar los efectos de la reducción del ruido en los patrones
de sueño a los tres meses de vida.
3. Evaluar los efectos de la reducción del ruido en el rendimiento
del personal.
4. Evaluar los efectos de la reducción del ruido en la unidad de
cuidados intensivos neonatales (UCIN) sobre la satisfacción de
los padres con la atención.
Estrategia de búsqueda
Se hicieron búsquedas en el Registro Cochrane Central
de Ensayos Controlados (Cochrane Central Register of
Controlled Trials) (
The Cochrane Library
), MEDLINE, EMBASE,
CINAHL, resúmenes de reuniones científicas, registros de
ensayos clínicos (clinicaltrials.gov;
controlledtrials.com; y who.
int/ictrp), reuniones anuales de las
Pediatric Academic Socie-
ties
2000 a 2014 (Abstracts2View
TM
), listas de referencias de
ensayos identificados, y revisiones hasta noviembre de 2014.
Criterios de selección
Lactantes prematuros (
<
32 semanas de edad posmenstrual
(EPM) o
<
1500g de peso al nacer) atendidos en el área de reani-
mación, durante el transporte o una vez que ingresaron a la
UCIN o a una unidad de menor nivel.
Obtención y análisis de los datos
La recopilación y el análisis de los datos se realizaron según
los métodos del Grupo de Revisión Cochrane de Neonatología
(
Cochrane Neonatal Review Group
).
Resultados principales
Un estudio pequeño de alta calidad que evaluó los efectos de
los tapones de oído de silicona versus ningún tapón de oído
calificó para inclusión. Los criterios originales de inclusión del
protocolo estipularon una edad
<
48 horas al momento de
iniciar la reducción del ruido. Se produjo una desviación del
protocolo y se incluyó este estudio en el que algunos lactantes
tenían
>
48 horas de vida. No hubo diferencias significativas en
el peso a las 34 semanas edad posmenstrual (EPM): diferencia
de medias (DM) 111g (intervalo de confianza [IC] del 95%:
-151 a 374g) (n=23). No hubo diferencias significativas en el
peso a los 18 a 22 meses de edad corregida entre los grupos:
DM 0,31kg; IC del 95%:-1,53 a 2,16 (n=14). Hubo una dife-
rencia significativa en el
Mental Developmental Index
(Bayley
II) que favorece al grupo de tapones de oído de silicona a los
18 a 22 meses de edad corregida:DM 14,00; IC del 95%:3,13
a 24,87 (n=12), pero no para el Psychomotor Development
Index (Bayley II) a los 18 a 22 meses de edad corregida:DM
-2,16;IC del 95%:-18,44 a 14,12 (n=12).
Conclusiones de los autores
Hasta la fecha, solamente 34 lactantes se han incluido en un
ensayo controlado aleatorio (ECA) que prueba la efectividad
de reducir los niveles de ruido que llegan a los oídos de los
lactantes en la UCIN. En base al pequeño tamaño de la mues-
tra de este único ensayo, no se pueden hacer recomendaciones
para la práctica clínica. Se necesitan ensayos más grandes, bien
diseñados, realizados e informados.
Resumen en términos sencillos
Reducción de ruidos en la unidad de cuidados intensivos
neonatales para lactantes prematuros o de muy bajo peso
al nacer
Antecedentes
Los lactantes en la unidad de cuidados intensivos neonatales
(UCIN) están expuestos a estrés, que incluye ruidos de alta
intensidad. El ambiente de ruido en la UCIN es más fuerte
que en la mayoría de los ambientes domiciliarios o de oficina
y contiene ruidos molestos de corta duración y a intervalos
irregulares. Hay señales de ruido en competencia que con
frecuencia afectan a los lactantes prematuros, al personal y a
los padres. Los niveles de ruido en la UCIN varían de 7 dB a 120
dB y a menudo exceden el nivel máximo aceptable de 45 dB
recomendado por la American Academy of Pediatrics. La defi-
ciencia auditiva se diagnostica en el 2% al 10% de los lactantes
prematuros versus el 0,1% de la población pediátrica en general.
El ruido puede causar apnea, hipoxemia, alternancia en la satu-
ración de oxígeno y mayor consumo de oxígeno secundario a
las elevadas frecuencias del corazón y respiratorias y puede,
por lo tanto, reducir la cantidad de calorías disponibles para
el crecimiento. Se necesitan niveles elevados en el habla para
superar el ambiente ruidoso en la UCIN, por lo que aumentan las
repercusiones negativas sobre el personal, los recién nacidos y
sus familias. Los niveles altos de ruido se asocian con una mayor
tasa de errores y accidentes, lo que provoca una reducción en
el rendimiento del personal. El objetivo de todas las interven-
ciones consideradas para inclusión en esta revisión es reducir
los niveles de ruido que llegan al neonato a 45 dB o menos. Este
objetivo se puede lograr mediante la disminución de los niveles
de ruido en toda la unidad, tratar al lactante en una sección de
la UCIN, en una habitación “privada” o en incubadoras en las
cuales se controlan los niveles de ruido, o al reducir los niveles
de ruido que llegan al lactante individual al utilizar orejeras o
tapones de oído. Al reducir los niveles de ruido que llegan al
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(4) 551-553]