836
4.
La evaluación continuada, esto es, la habilitación
diagnóstica
, porque en cada sesión de habilitación tenemos
posibilidades de valorar cómo es la capacidad de interacción
del bebé, su mirada, su relación con los objetos, su atención,
capacidad de aprendizaje, poniendo especial atención en las
señales de alarma en el desarrollo de la comunicación. Todas
estas informaciones serán especialmente válidas para el ajuste
de expectativas y en relación al pronóstico (4).
5.
La coordinación entre el ámbito educativo y clínico
es fundamental y en muchas ocasiones es el logopeda que
trabaja en el ámbito sanitario, quien realiza este impor-
tante papel, ayudando a la familia a conocer los recursos
locales, por ej. centro de atención temprana, asociaciones
de padres, posibilidades de escolarización, entre otros.
Este es un proceso que durará unos meses y que comprende
la adaptación de los audífonos como parte del tratamiento;
este momento es crítico, porque hace visible una discapa-
cidad que hasta el momento era conocida únicamente por
la familia, debemos tratar con respeto la forma en la que
la familia decide comunicar esta noticia a sus familiares y
amigos. Por otro lado, los padres son fundamentales para
garantizar el uso continuado de los audífonos y necesitan
ser constantes en la colocación, sujeción, limpieza, cambio
de pilas y verificación del funcionamiento. Es importante
que se repartan estas tareas entre los cuidadores princi-
pales, cuando solamente uno de los padres o de los cuida-
dores conoce el funcionamiento de los audífonos, si el niño
se encuentra, por ej. con los abuelos u otros cuidadores a lo
largo del día no tendremos la certeza de que el niño utilice
los audífonos correctamente.
En las sesiones siempre empezamos asegurándonos del
correcto funcionamiento de las ayudas auditivas, la prueba
de Ling (5) es ampliamente conocida por su facilidad y fiabi-
lidad en el uso, dentro y fuera del ámbito clínico, así tanto
la familia como el terapeuta podrán verificar las respuestas
del niño con los audífonos.
En este período las prótesis auditivas son parte fundamental
de la rehabilitación auditiva, pero también deben contem-
plarse como una herramienta diagnóstica, en aquellos casos
en los que el grado de la pérdida auditiva es mayor (severo
-profunda), debemos conocer de qué manera la estimula-
ción auditiva a través de los audífonos resulta eficaz.
Existen algunos escenarios en los que se podrá considerar
una implantación unilateral y combinar la estimulación
acústica a través de un audífono en el oído contralateral.
En las asimetrías hay que asegurar cuál es el mejor oído para
el aprovechamiento de la estimulación acústica y se evalúa
a través de pruebas audiológicas y también a través de la
rehabilitación, dónde es posible observar cómo se apro-
vecha esa estimulación en tareas de discriminación y reco-
nocimiento.
El bebé utiliza sus audífonos de 3 a 6 meses. En esta etapa
prelingual las actividades de entrenamiento auditivo son
primordialmente de detección, el bebé empieza a conocer
su entorno sonoro, las voces familiares. Las respuestas de
detección en sorderas severo-profundas pueden demorarse
o desgraciadamente no aparecer. Podemos observar que el
bebé progresa en algunas rutinas, por ejemplo agitar la mano
para decir "Adiós" o acercar su cabeza al solicitarle un beso,
pero estas respuestas están vinculadas a unas rutinas y a unos
escenarios muy concretos, en los que el niño responde no
solamente a órdenes verbales sino situacionales.
Las modificaciones en el balbuceo, son también un factor
predictivo del aprovechamiento de la estimulación audi-
tiva, conocer las características acústicas del desarrollo del
balbuceo es muy importante para el logopeda que trabaja
en estas primeras etapas. Anteriormente hemos hablado
de la trascendencia que la familia tiene, en la observación
y recogida de estas primeras respuestas, así existen en la
actualidad algunas herramientas diseñadas para la recogida
por parte de los padres, de la información relativa a la audi-
ción y las primeras producciones:
Cuestionarios para las primeras etapas:
•
Infant-Toddler Meaningful Auditory Integration Scale
(IT-MAIS) (Zimmerman-Phillips 2000).
•
Meaningful Auditory Integration Scale
(MAIS) (Robbins et al.
1991).
•
Meaningful use of speech scale
(MUSS) (Amy M. Robbins, MS
and
Mary Joe Osberger, PhD
Indiana University School of
Medicine
). 1991.
•
The Infant Monitor of vocal Production
(IMP) (Cantle Moore,
2004).
Toda la información que podamos recabar previa a la
implantación, será valorada junto a las pruebas médicas y
audiológicas entre otras. Insisto en el valor de los padres
como observadores, esta es una información fiable (6) como
se ha demostrado ampliamente. En todo caso, si las valora-
ciones difieren de la apreciación de los profesionales o de
los resultados de las pruebas objetivas, se deberán ajustar
las expectativas de la familia en relación al beneficio de los
audífonos y ante un futuro implante coclear.
La ansiedad de la familia a la espera de un implante coclear es
grande, pero cuando participan activamente en el proceso,
desde la evaluación hasta el tratamiento, tiene, una visión
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(6) 834-839]