Previous Page  100 / 164 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 100 / 164 Next Page
Page Background

360

insuficiencia respiratoria y la muerte, si es que no hay compli-

caciones antes.

La silicosis tiene tres formas de presentación clínica (8, 9), las

que describimos a continuación.

Silicosis aguda

Es la forma menos frecuente. El cuadro clínico de la silicosis

aguda se presenta en sujetos que han estado expuestos a muy

altas concentración de sílice y dentro de un período breve, de

menos de dos años.

El cuadro clínico es el de disnea progresiva, con fiebre, baja de

peso y con extensas opacidades bilaterales a las radiografías y la

tomografía, producidas porque los alveolos se llenan de material

rico en proteínas, idéntico a la proteinosis alveolar, enfermedad

bastante rara. En la actualidad se sabe que la proteinosis alveolar

es producida por un déficit en un receptor de los macrófagos

(10) así que es probable que en muchos de los casos reportados

previamente en la literatura, el sílice haya actuado solamente

como gatillante de la enfermedad.

El diagnóstico de silicosis aguda es el único que no se hace a

partir de la lectura de radiografías OIT mencionadas en el apar-

tado anterior, ya que el cuadro clínico radiológico es completa-

mente distinto a la silicosis clásica.

Silicosis acelerada

La silicosis acelerada se presenta radiológicamente igual que la

silicosis crónica, pero de forma precoz. Esta forma clínica se da en

sujetos expuestos a un nivel alto de sílice y luego de entre 5 y 10

años de exposición. El pronóstico no es bueno y la enfermedad

suele tener un curso de progresión rápido (de ahí la denomina-

ción de acelerada) respecto a lo que es una silicosis crónica.

Silicosis crónica

Corresponde a la forma clásica y la más habitual de ver. General-

mente se diagnostica asintomática como parte de un programa

de tamizado, según lo descrito en el apartado previo. Esta forma

clínica tarda entre 20 y 30 años en aparecer luego de haber

estado expuesto. Generalmente su progresión es lenta y si fue

detectada precozmente, tardará otros 20 o 30 años hasta la

etapa terminal de la enfermedad.

Tratamiento

La silicosis no tiene un tratamiento específico.

La silicosis aguda puede beneficiarse de lavado pulmonar total,

procedimiento broncoscópico que permite remover el material

proteico de los alveolos (11).

En las silicosis crónicas, si ésta se detecta precozmente y el

paciente deja de estar expuesto, no habrá progresión, los sujetos

no tendrán insuficiencia respiratoria, aunque pueden presentar

algunas complicaciones. En cambio, en las formas aceleradas

y la silicosis crónica avanzada suele ir progresando aunque el

sujeto ya no esté expuesto a sílice.

El tratamiento suele basarse en el uso de broncodilatadores,

aunque no existe evidencia que sustente su utilidad. En las

etapas avanzadas se utiliza oxígeno.

Complicaciones

La silicosis tiene diversas complicaciones, siendo las dos más

relevantes la tuberculosis y el cáncer pulmonar.

La incidencia de tuberculosis en estos pacientes parece ser

mayor que la población general, existiendo además la conside-

ración de que la tuberculosis en personas con silicosis puede ser

de diagnóstico muy difícil por la baja carga bacilifera existente.

Generalmente se requiere un alto índice de sospecha clínica.

El tratamiento no debiera ser distinto que el de la tuberculosis

normal, aunque el pronóstico de los pacientes suele ser peor (12).

Los pacientes con silicosis tienen mayor incidencia de cáncer

pulmonar (13) y de hecho, la organización internacional para

la investigación del cáncer (IARC) dependiente de la OMS ha

declarado al sílice como agente carcinogénico comprobado, lo

que hace aún más imperativo el control de la enfermedad (14).

Al igual que con la silico tuberculosis, el diagnóstico suele ser

difícil y requiere alta sospecha, ya que el cáncer se desarrolla

sobre un pulmón que suele tener lesiones anteriores.

Prevención

El principal elemento para el control de la silicosis es la preven-

ción, la que se basa en el uso de equipos de protección personal

en áreas donde hay exposición y la implementación de medidas

para mantener niveles ambientales de polvo de sílice bajo

concentraciones seguras.

La vigilancia de los trabajadores se hace mediante controles

regulares con radiografía con técnica OIT, para detectar sujetos

con silicosis en fases tempranas y retirarlos de nueva exposición.

La OIT y la OMS han propuesto un plan de erradicación de la sili-

cosis para el 2030, a través de una intensa campaña de control

y detección, a la cual Chile ha adherido. Toda la información

relativa a esta campaña se puede encontrar en la página web

desarrollada para estos fines (15).

Asma ocupacional

El asma ocupacional es la enfermedad laboral respiratoria

más frecuente en el mundo desarrollado. Diversos estu-

dios estiman que entre el 10 a 20% de los pacientes adultos

[REV. MED. CLIN. CONDES - 2015; 26(3) 357-366]