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el primero. En modelos experimentales con ratas sometidas

a nefrectomía 5/6, aparece una enfermedad glomerular

absolutamente independiente del daño producido por la

cirugía, que se caracteriza por proteinuria y progresión de la

insuficiencia renal. La histología muestra hipertrofia y esclerosis

focal y segmentaria en los glomérulos remanentes (10). En

ese modelo es evidente que después del factor productor

de insuficiencia renal, la nefrectomía 5/6, se agregan otros

responsables de la enfermedad glomerular y la progresión del

daño renal. Hay evidencias experimentales que el aumento del

flujo plasmático renal (QB), presión del capilar glomerular (PCG)

la consecuente hiperfiltración que aparece en las nefronas

remanentes es la causa del daño glomerular agregado a la

condición de fondo y progresión del daño renal. A la semana

de nefrectomía 5/6 en ratas machos Munich-Wistar se observa

que la PCG de las nefrectomizadas 5/6 respectivamente es

63mmHg vs 49mmHg en las controles y la (taza de filtración

glomerular por nefrón aislada (SNGFR) es de 62nL/min vs

28nL/min. (Figura 1). Estos cambios funcionales se acompañan

de alteraciones estructurales iniciales como gotas de

reabsorción proteica en las células epiteliales, fusión podocitaria

y expansión del mesangio (11). Lo mismo ha sido demostrado

en ratas diabéticas (12, 13). Ello ocurre por trasmisión de

la hipertensión sistémica al glomérulo y constricción de la

arteriola eferente (A Ef) por acción de angiotensina II (A II) y

endotelina - 1 (ET-1). El aumento de la PCG y QB determinan

daño mecánico del endotelio, con liberación de citoquinas

como TGF-b (Transforming Growth Factor-b) y PDGF

(Platelet

Derived Growth Factor)

que inducen en las células mesangiales

un aumento de la formación de matriz y colágeno. La A II y ET-1

también actúan como factores de crecimiento y estimulan

la liberación de las citoquinas ya mencionadas. Además

con el aumento de la PCG hay un mayor tráfico de proteínas

hacia mesangio, lo que estimula la proliferación de células

mesangiales, formación de matriz mesangial y colágeno. De tal

manera que la proteinuria, favorecida por aumento de la presión

capilar glomerular, es factor independiente de progresión del

daño glomerular (14, 15).

Uno de los soportes más convincentes de la importancia de

los factores hemodinámicos en la producción y progresión de

nefropatía diabética en humanos ha sido el haber encontrado

en la autopsia de un diabético, la presencia de nefropatía

diabética unilateral, estando ausente en el riñón contralateral.

Este último, el riñón sin nefropatía diabética, tenía una estenosis

de su arteria renal, de lo cual se deduce que sus glomérulos

estaban protegidos de la HTA e hiperfiltración, única diferencia

con el riñón enfermo, ya que ambos estaban expuestos a los

mismos trastornos bioquímicos de la diabetes (16, 17).

La reducción de la PCG protege al glomérulo del daño

producido por hiperfiltración. Si se bloquea el (Eje R-A-A)

Renina-Angiotensina–Aldosterona, baja la PCG por reducción

de la presión arterial sistémica y dilatación de la A Ef por

desaparición de la acción de la AII sobre esta.

Anderson y cols (12) estudiaron la hemodinámica glomerular,

aparición de albuminuria y obsolecencia glomerular en tres

grupos de ratas machos Munich-Wista hechas diabéticas

mediante estreptozotocina y un grupo de no diabéticas

usadas como control (C). En las diabéticas un grupo solo

recibió insulina (DM). El segundo grupo de diabéticas recibió

insulina y Captopril (DM+Capt) y el tercer grupo insulina más

triple terapia anti HT de la época, reserpina, hidralazina e

hidroclorotiazida. (DM+RP Clásico). La reducción de presión

arterial (PA) fue comparable en las tratadas con Captopril

(-21mmHg) y las con terapia clásica (-30mmHg). A las 6

y 10 semanas, las ratas diabéticas sin terapia mostraron

elevación de velocidad de filtración glomerular por nefrona

intacta (SNGFR) debido a las elevaciones del flujo plasmático

renal y de la presión del capilar glomerular (PCG) pero, en

las DM+CAP y las DM+RP Clásico la reducción de PA se asoció

con la normalización selectiva de la PCG, sin cambiar en

SNGFR. A las 70 semanas las ratas DM desarrollan marcada

albuminuria y esclerosis del 12% de los glomérulos.

Las DM+CAP tuvieron escasa albuminuria y sólo un 0.4% de

los glomérulos esclerosados mientras que la terapia clásica,

sólo sirvió para retrasar, pero no para prevenir, el aumento

de la albuminuria aunque fue capaz de reducir la esclerosis

glomerular a un 4%. Sin embargo, el Captopril fue 10 veces

más eficaz, con sólo un 0,4% de glomérulos esclerosados

(Figura 2). Estos resultados confirman la observación clínica

que el tratamiento anti hipertensivo previene o detiene o

Figura 1. Velocidad de filtración glomerular

por nefrón aislado (SNGFR) y presión del capilar

glomerular (PCG)

Adaptado de Hostetter

et al

Referencia 11.

Control,

SNGFR,

28

Control,

PCG, 49

Nef %/6,

SNGFR,

63

Nef %/6,

PCG, 62

VFG

Controles

Riñones de ratas con ablación renal 5/6

[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(2) 204-212]