J. Bustamante-Munguira, M.
Juez
/ Cir Cardiov. 2016;
23(1)
:38–44
39
Figura 1.
Imagen de TAC
torácica que muestra
la presencia de un hematoma
intra-
mural en aorta ascendente.
Disección aórtica
Es
la
disrupción
de
la
capa media
de
la
pared
aórtica
con
san-
grado hacia dentro y a
lo
largo de
la pared
( fig. 2 ).Esto genera, como
consecuencia,
la
separación de
las
capas parietales
( fig. 3 ).Quedan
así
2
luces,
una
falsa
y
una
verdadera,
separadas
por
un
«
flap
»
intimal
( figs. 4 y 5 ). Debido
a
la
presión
arterial
se
puede
romper
la
íntima
distalmente,
reconduciendo
el
flujo
a
la
luz
verdadera,
o
romper
la
adventicia,
provocando
hemorragia
o
hematoma
periaórtico.
Otro
fenómeno
evolutivo
es
la
trombosis
de
la
luz
falsa a medida que pasa el
tiempo en
función de
las circunstancias,
como
es
en
el
caso
de
la
corrección
de
la
puerta
de
entrada
en
el
procedimiento quirúrgico o el correcto control del doble producto.
De
dicha
rotura
se
derivan
diferentes
complicaciones
causadas
Figura
2.
Reconstrucción de
TAC multicorte
en
la que
se
aprecia disección
aórtica
tipo A.
Figura
3.
Imagen de
TAC
torácica
que muestra disección
aórtica
tipo A
y derrame
pleural
izquierdo.
Figura
4.
Imagen
de
ecocardiograma
transesofágico
en
la
que
se
observa
la
luz
verdadera,
la
luz
falsa así
como
la puerta de entrada.
por
problemas
fundamentalmente
obstructivos,
por
el
flap,
o
de
déficit de perfusión. En
la mayoría de
los casos
(60-90%) esta rotura
(puerta de entrada) es visible y
se puede diagnosticar mediante
las
pruebas de
imagen,
como veremos más adelante
( fig. 4 ).Figura 5.
Imagen de ecocardiograma
transesofágico en
la que
se observa el flap de
la disección aórtica.