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J.M. Arribas
et al.
/ Cir Cardiov. 2016;
23(2)
:70–75
No
implantamos ningún marcapasos ni
en
el periodo hospitalario
ni en el
seguimiento,
lo que
contrasta
con
la
tasa de más del 7% de
implante de marcapasos definitivo del estudio Triton
15
. La mortali-
dad de nuestra
serie
fue del 0% vs el 2,1% del estudio Tritón a
corto
plazo y del 4% vs 7,5% del estudio Triton
15
en el
seguimiento.
Con
respecto
a
nuestra
propia
evolución
durante
el
estudio
(
tabla
2
),
cabe
destacar
que
se
observa
una
clara
disminución
de
la
estancia
hospitalaria
en
la
segunda mitad
del
estudio
(de
hasta
un
43%),
con
una
clara
tendencia
estadística
hacia
la
significación
(p = 0,06), con
lo que esto
supone de ahorro económico, que podría
interpretarse
como
una mayor
seguridad
en
el manejo
de
estos
pacientes
que
se
recuperan
antes de
la
intervención por parte del
todo
el
equipo médico.
También
se
observa
una
disminución
del
tiempo de
circulación extracorpórea en
la
segunda mitad del estu-
dio, pero sin
lograr significación estadística; es probable que esta se
logre con una población mayor. Creemos que con mayor experien-
cia en el uso de estas prótesis de rápido despliegue y el consiguiente
entrenamiento por parte de
los
equipos quirúrgicos,
anestésicos y
de
cuidados
postoperatorios
en
el manejo
de
estos
pacientes
se
podrán
lograr
reducciones
aún más
significativas
en
los
tiempos
quirúrgicos, de estancia en
la UCI y de estancia hospitalaria
La
aparición
de
estas
prótesis
de
rápido
despliegue
nos
puede
permitir
a
los
clínicos ofrecer un mayor
abanico de opciones
tera-
péuticas a
los pacientes con estenosis aórtica. Así,
se puede ofrecer
la
cirugía
valvular
aórtica
convencional
para
pacientes
con
riesgo
bajo
o medio,
la
TAVI
para
pacientes
inoperables
o
con muy
alto
riesgo
quirúrgico,
y
las nuevas prótesis
de
rápido
despliegue para
pacientes en esa zona gris que se podrían beneficiar tanto de
la ciru-
gía
convencional
como
de
la
terapia
percutánea
por
tener
un
alto
riesgo operatorio.
Por
otro
lado,
este
tipo
de
prótesis
de
rápido
despliegue
facili-
tan y animan el abordaje menos
invasivo en
la cirugía de
recambio
valvular
aórtico, bien mediante
la hemiesternotomía media
supe-
rior
o mediante
la minitoracotomía
derecha.
Diferentes
estudios
han mostrado
beneficios
clínicos
de
estos
abordajes menos
agre-
sivos
en
forma
de menor
dolor, menor
estancia
en
unidades
de
cuidados
intensivos, menor tiempo de ventilaciónmecánica, menor
tasa
de
transfusión
postoperatoria,
menor
estancia
hospitalaria
y
más
rápida
recuperación
postoperatoria,
así
como
beneficios
estéticos
20-22
.
La presencia en esta válvula del marco expandible de acero que
se
despliega
por
debajo
del
anillo
aórtico
nos
permite
pensar
en
un comportamiento hemodinámico muy bueno al abrir más con el
marco expandible el tracto de salida del ventrículo izquierdo,
lo cual
puede
ser más útil
en
los
pacientes
con
anillos
aórticos
peque˜nos
y
con
septos muy hipertróficos.
La
evolución hemodinámica
en
el
tiempo
de
esta
válvula
en
pacientes
con
números
peque˜nos
nos
puede
confirmar esa atractiva hipótesis.
Un
elemento
a
vigilar
son
las
fugas
periprotésicas
mayores
de
grado 2,
que
presentan
una
incidencia
hospitalaria
del
4%
(un
paciente),
que
resulta menor
que
los
indicados
en
registros
europeos
de
TAVI
23,24
(14%),
y
que
sube
al
8%
(2
pacientes)
en
el
seguimiento, de nuevo mejor que
los grados de regurgitación a más
largo
plazo
informados
en
registros
TAVI
25
(21%). Aunque
ambos
pacientes
se
encuentran
en
grado
i
de
la NYHA,
hay
trabajos
con
TAVI
que
relacionan
las
fugas
periprotésicas moderadas-severas
con
un
peor
pronóstico
a
medio-largo
plazo
23-25
.
También
hay
publicaciones
en
relación
con
TAVI
que muestran
que
el
grado
de
insuficiencia
aórtica periprotésica permanece
estable
e
incluso
disminuye durante el primer a˜no
tras el
implante
26
. Aunque hasta
ahora
en
esta
serie
no
hayamos
tenido
ni
hemólisis
ni
endocar-
ditis,
debemos
vigilar
el
impacto
que
esta
regurgitación
residual
pueda
tener
en
estas
complicaciones más
a
largo
plazo,
así
como
su
influencia
sobre
la
normalización
de
la
masa
del
ventrículo
izquierdo. Con respecto a
las causas de estas
fugas periprotésicas, se
puede pensar
en una
insuficiente decalcificación del
anillo
aórtico
que
dificulte
un
posterior
despliegue
homogéneo
de
la
prótesis,
una deficiente medición del anillo aórtico que provoque una
libera-
ción
subóptima de
la prótesis bien
a nivel
infraanular, bien
a nivel
supraanular, o bien por un
imperfecto despliegue de
la prótesis por
no
llegar
a
la
presión
necesaria.
Estos
factores
se
irán
corrigiendo
con una mayor experiencia del equipo quirúrgico, con
la mejora de
los
instrumentos
de medida
del
anillo
aórtico,
tanto
en
el
estudio
preoperatorio
como
en
la
intervención
quirúrgica,
así
como
con
una
progresiva
simplificación
del
proceso
de
despliegue
de
estas
prótesis. De cualquier manera,
la reducción de
la
tasa de
fugas peri-
protésicas
representa un objetivo de primer nivel en
la mejora del
dise˜no de nuevas prótesis de
rápido despliegue
y de
su
técnica de
implante.
Por
otro
lado,
aunque
el
sistema
Edwards
Intuity
es
heredero
de
la prótesis Carpentier-Edwards
Perimount,
implantada
en más
de medio millón
de
pacientes
en
todo
el mundo
y
con
un
óptimo
comportamiento
a
largo
plazo
17,27-29
,
por
lo
que
se
podría
asu-
mir un comportamiento semejante del nuevo dispositivo, se deben
realizar
estudios
a
largo
plazo
para
confirmar
su
durabilidad
y
su
comportamiento hemodinámico a
lo
largo del
seguimiento.
Este
es
un
estudio
no
aleatorizado,
de
un
único
brazo
y
sin
grupo
control.
Presentamos
una
población
peque˜na,
de
un
único
centro y con seguimiento
limitado de un a˜no, y el comportamiento
a más
largo
plazo
y
las
complicaciones
pueden
variar
y
diferir
a
lo
largo
de
un
periodo
de
tiempo más
prolongado.
Sin
embargo,
nuestra
población
refleja
un
escenario
actual
del mundo
real,
con
pacientes
de
nuestra
práctica
clínica
diaria,
lejos
de
los
pacientes
altamente
seleccionados para estrictos y
restrictivos estudios
con-
trolados y aleatorizados. Los resultados obtenidos de estos registros
del mundo
real
son
importantes
para
guiar
el
futuro
desarrollo
de
estas
prótesis
de
despliegue
e
implante
rápido
en
posición
aórtica.
Conclusiones
En nuestra experiencia, el
implante del sistema Edwards
Intuity
para el
tratamiento de
la estenosis aórtica ha
resultado ser
factible,
seguro,
reproducible
y
eficaz.
Los
tiempos
de
isquemia miocár-
dica y de circulación extracorpórea obtenidos parecen
reducirse en
comparación
con
la
cirugía valvular aórtica habitual. Por otro
lado,
facilita y anima a
la
cirugía menos
invasiva.
El
comportamiento hemodinámico
inicial y a medio plazo de
la
prótesis Edwards
Intuity es excelente, aunque se debe continuar su
estudio para
lograr poblaciones y seguimientos más amplios. Debe-
mos mantener una vigilancia estrecha sobre
los pacientes con
fugas
periprotésicas,
sobre
todo en
los de grado al menos moderado. Por
último,
hay
que
destacar
la
buena
hemodinámica
de
los
números
más peque˜nos.
Responsabilidades éticas
Protección de personas y animales.
Los autores declaran que para
esta
investigaciónno se han realizado experimentos en seres huma-
nos ni en animales.
Confidencialidad
de
los
datos.
Los
autores
declaran
que
han
seguido
los
protocolos
de
su
centro
de
trabajo
sobre
la
publica-
ción de datos de pacientes y que
todos
los pacientes
incluidos en el
estudio han
recibido
información
suficiente y han dado
su consen-
timiento
informado por escrito para participar en dicho estudio.
Derecho a
la privacidad y consentimiento
informado.
Los auto-
res declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.