Previous Page  23 / 160 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 23 / 160 Next Page
Page Background

23

MANEJO DEL NIÑO QUE RONCA

El ronquido en un niño es el elemento semiológico más

habitual para sospechar la existencia de un TROS. Lo

primero es seleccionar a los pacientes que roncan 4 o

más noches por semana. Es muy importante obtener una

completa anamnesis y examen físico orientados a este

tipo de trastornos: síntomas diurnos, síntomas nocturnos,

signos al examen físico que se asocian a TROS y presencia

de una condición de base predisponente (Tabla 1).

TABLA 1. SOSPECHA CLÍNICA DE UN TRASTORNO

RESPIRATORIO OBSTRUCTIVO DEL SUEÑO

1. Síntomas

diurnos

2. Síntomas

nocturnos

3. Signos al

examen físico

4. Condición

de base

predisponente

- Conducta hiperactiva o somnolencia

diurna

- Cefalea matinal

- Mal rendimiento escolar

- Dificultad en la concentración

- Problemas de conducta: agresividad,

impulsividad, oposicionismo

- Ronquido al dormir

- Sueño inquieto, no reparador

- Diaforesis

- Enuresis

- Aumento del trabajo respiratorio

- Apneas observadas

- Posiciones bizarras al dormir

- Pesadillas, sonambulismo, bruxismo

- Hiperplasia adenoamigdaliana

- Facie adenoídea, respiración bucal

- Signos de atopia, rinitis alérgica,

hipertrofia de cornetes, pólipos

- Macroglosia

- Alteraciones dentomaxilares

- Paladar ojival

- Clasificación de Mallampati clase IV

- Micrognatia o Retrognatia

- Hipertensión arterial o hipertensión

pulmonar no explicada por otras

causas

- Condición de base predisponente

- Malformaciones cráneo-faciales

- Malformaciones del SNC

- Enfermedades neuromusculares

- Síndrome de Down y otras

genopatías

- Obesidad

- Mucopolisacaridosis

- Acondroplasia

- Síndromes de hipoventilación

central

- Enfermedad pulmonar crónica

- Abuso de fármacos

Sin embargo, en muchos casos estos elementos son insufi-

cientes para asegurar o descartar la presencia de un TROS

(valor predictivo positivo 40-60%) (42), por lo que, espe-

cialmente en presencia de una condición de base predis-

ponente, estos pacientes deben ser derivados a un centro

especializado para su estudio y manejo multidisciplinario.

Dentro de los estudios posibles de los TROS se cuentan

los cuestionarios de síntomas, las grabaciones de video, la

saturometría nocturna continua, la poligrafía respiratoria

(PR) y la polisomnografía (PSG), siendo esta última consi-

derada el “estándar de oro”.

Cuestionarios de síntomas:

uno de los más conocidos

en pediatría es el desarrollado por Chervin (43), reciente-

mente validado en su versión en Español (44). Aunque no

se ha demostrado una correlación suficiente con la PSG,

pueden ser útiles como método de tamizaje (45).

Grabación de video casero:

puede ser útil para valorar la

intensidad del ronquido y el grado de esfuerzo respiratorio

del niño durante el sueño. También se ha utilizado como

tamizaje con una sensibilidad de 94% y especificidad de

68%, comparado con PSG (46).

Saturometría nocturna continua:

en pacientes con

elevada sospecha de presentar un TROS, si resulta alterada,

se puede considerar diagnóstica de un SAOS, aunque un

resultado normal no descarta un TROS y no logra distin-

guir eventos obstructivos de los centrales (47). Tres o más

bloques de desaturación de al menos 4% o 3 o más desa-

turaciones bajo 90% se considera alterada. En países con

recursos limitados permitiría priorizar a los pacientes que

deben ser tratados.

Poligrafía respiratoria:

consiste en el registro simul-

táneo de variables fisiológicas respiratorias, como el

flujo aéreo, con doble sistema de registro (termistor y

cánula nasal con transductor de presión), movimientos

del tórax y abdomen, oximetría de pulso con registro

de la onda de pulso, sensor de posición y detección de

ronquido. Es posible adicionar registro de electrocardio-

grama y actímetro y se puede realizar en hospital o en

domicilio, obteniéndose en este último caso resultados

validados (48). La PR en domicilio no cuenta con super-

visión técnica durante el registro, subestima el índice de

apnea-hipopnea ya que no puede detectar las hipoapneas

asociadas a microdespertares y que no se acompañan de

caídas en la saturación de oxígeno(SaO

2

), aunque en los

casos severos, los resultados son igualmente útiles que

los obtenidos mediante PSG (49). Tiene la ventaja de ser

de menor costo y lograr un sueño más fisiológico en el

propio dormitorio del niño.

[EL NIÑO QUE RONCA: IMPORTANCIA Y MANEJO - Dr. Selim Abara]