Previous Page  24 / 160 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 24 / 160 Next Page
Page Background

24

Polisomnografía:

este examen se realiza con paciente

hospitalizado y requiere supervisión técnica durante la

noche. Además de las variables fisiológicas que registra

la PR se incluyen otras como electroencefalograma, elec-

trooculograma, electromiograma submentoniano y tibial

anterior, CO

2

espirado o transcutáneo, electrocardio-

grama y video-monitorización (Tabla 2), lo que permite:

etapificar los estadios de sueño, detectar microdesper-

tares (arousal) y las hipopneas asociadas a estos que no

se acompañan de caídas en la SaO

2

, sospechar el diag-

nóstico de síndrome de resistencia de vía aérea superior,

obtener una mejor evaluación del intercambio gaseoso con

detección de hipoventilación, registrar movimientos anor-

males y algunas parasomnias y sospechar la presencia de

elementos paroxísticos en el EEG.

Se cuantifica el número de apneas e hipopneas por hora

de sueño (Índice de apnea-hipopnea) (IAH), que constituye

el mejor parámetro para expresar la gravedad del TROS.

Idealmente debe separarse el IAH de tipo central del tipo

obstructivo-mixto, por las diferentes implicancias que tiene

(6). En el caso del SAOS se clasifica su gravedad en catego-

rías de leve, moderado y severo, con valores de IAH de 1-5,

5-10 y

>

10 respectivamente (50). También se considera,

para evaluar la severidad del SAOS, el nadir de SaO

2

, y si se

cuenta con Capnografía, el peak de este parámetro y el%

de tiempo con CO

2

>

50mmHg (Tabla 3). Los criterios para

aceptar un evento como apnea central, obstructiva o mixta,

hipopnea, respiración periódica, caída en la SaO

2

, micro-

despertar (arousal) y la etapificación del sueño, así como

los requisitos técnicos de la PSG, se encuentran amplia-

mente expuestos en el manual de la Academia Americana

de Medicina del Sueño (51). Dado el elevado costo de este

examen y el no contar con el mismo en todos los centros

hospitalarios debe hacerse una selección de casos para su

realización que contemple la disponibilidad de recursos en

el país correspondiente. Más adelante propondremos un

flujograma para la toma de decisiones.

TRATAMIENTOS DE LOS TRASTORNOS

RESPIRATORIOS OBSTRUCTIVOS DEL SUEÑO

Tratamiento farmacológico:

se puede intentar en

pacientes que no exhiban comorbilidades ni un SAOS

grave. El uso de corticoides nasales puede reducir la infla-

mación de la mucosa nasal, especialmente en presencia de

rinitis alérgica. También se ha demostrado una reducción

del tamaño del tejido adenoideo, disminuyendo la seve-

ridad del TROS (52), independiente de si el niño es alérgico

u obeso. Utilizado por 4 semanas su efecto puede perdurar

hasta 8 semanas posterior a su interrupción (53). También

existen reportes favorables al uso de montelukast usado

12 semanas, logrando mejorar los índices de la PSG, los

síntomas y el tamaño de las adenoides (54). Se ha encon-

TABLA 2. VARIABLES FISIOLÓGICAS DE LA

POLISOMNOGRAFÍA

-Electroencefalograma: al menos 3 canales

-Electrooculograma: 2 canales

-Electromiograma submentoniano

-Flujo oro-nasal: mediante termistor y mediante cánula

nasal (transductor de presión)

-Esfuerzo respiratorio: bandas piezoeléctricas torácica

y abdominal o pletismografía de impedancia

-Evaluación del intercambio gaseoso: saturometría

nocturna (oximetría de pulso) y CO

2

espirado o

transcutáneo

-Electrocardiograma y frecuencia cardiaca

-Ronquido

-Posición corporal

-Actímetro

-Electromiograma tibial anterior (2 extremidades)

-Video monitorización (infrarrojo o ultra sensible)

TABLA 3. CRITERIO DE SEVERIDAD DEL SÍNDROME DE APNEA-HIPOPNEA OBSTRUCTIVO DEL SUEÑO

Leve

Moderada

Severo

1 – 4.9

5 – 10

>

10

53 - 60

60 – 65

>

65

86 - 91%

76 - 85%

<

75%

10 - 24%

25 - 49%

>

50%

Severidad

IAH

Nadir SaO

2

CO

2

máxima mmHg

% T° CO

2

>

50mmHg

Abreviaciones: IAH: índice de Apnea –Hipopnea; SaO

2

: saturación de oxígeno; CO

2

: anhídrido carbónico; %T°: % de tiempo; mmHg: milímetros de

mercurio.

[REV. MED. CLIN. CONDES - 2017; 28(1) 20-28]