Previous Page  148 / 180 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 148 / 180 Next Page
Page Background

304

Se recomienda, que todo AM visto en el SU reciba una evalua-

ción del

status

mental como estándar de manejo (16) y para

ello se recomienda el uso de instrumentos de tamizaje vali-

dados (

Delirium Triage Screen

y bCAM). Existen distintas

escalas de tamizaje, sin embargo existe poca evidencia

disponible específicamente en SU (17).

Respecto a las recomendaciones de manejo en AM hospita-

lizados, las guías NICE (18) postulan evaluar la presencia de

factores de riesgo al ingreso, la observación diaria con instru-

mentos de tamizaje e identificar elementos que orienten al

diagnóstico y aplicar criterios clínicos según corresponda

para confirmarlo.

El colegio americano de Medicina Intensiva (

American College

of Critical Care Medicine

) en sus guías del 2013 para el manejo

del dolor, agitación y delirium (19), recomienda la moni-

torización rutinaria de delirium, a través del CAM-ICU o el

Intensive Care Delirium Screening Checklist

(ICDSC). También

se ha planteado el uso de modelo de predicción clínica con

el fin de focalizar los esfuerzos en un grupo de mayor riesgo.

Tamizaje de delirium

Confussion Assessment Method

o CAM: Es la escala de tami-

zaje más recomendada (20). Se basa en el examen del

paciente y el reporte de familiares, enfermera y/o cuidador,

el tiempo de aplicación promedio es de 5 minutos. Posee

alta sensibilidad 94% (IC=91-97%) y especificidad 89%

(IC=85-94%), ha sido validada para ser usado por profesio-

nales de salud entrenados y traducido a distintos idiomas.

Se basa en identificar la presencia de un cambio en rela-

ción al basal del estado mental de carácter agudo y fluc-

tuante, luego la presencia de inatención. En seguida, se

busca la presencia de cambios en el nivel de conciencia y

del contenido del pensamiento. Si el paciente presenta los

dos primeros puntos y alguno de los otros (alteración del

contenido o nivel de conciencia), se considera un tamizaje

positivo.

CAM-ICU: Se desarrolló para pacientes en unidades de

cuidados críticos, incluso en ventilación mecánica (21). Ha

sido validada en Chile (22) y también adaptada al uso en SU y

para pacientes con o sin demencia. Es similar al CAM original

en la búsqueda de cambio agudo y fluctuante e inatención,

pero en seguida, se busca la presencia de cambios en el nivel

de conciencia mediante la Escala de Agitación y Sedación de

Richmond (RASS), con un puntaje entre +4 y -5, correspon-

diendo a un puntaje de +4 a alguien combativo/violento y en

otro extremo a alguien sin respuesta a la voz o al estímulo

físico un RASS de -5. Solo si el nivel de conciencia es normal,

se analiza el contenido del pensamiento, lo que facilita y

acorta su aplicación. Para evaluar la atención en personas que

no pueden hablar se usa identificación de letras o imágenes,

lo que ha permitido su uso en UCI.

Brief

-CAM (B-CAM): Versión breve. La diferencia fundamental

es que cambia la prueba de atención por la inversión de

meses del año (23).

Nursing Delirium Symptom Checklist

(NuDESC): Tamizaje

basado en la observación clínica durante las últimas 24 hrs,

que puede completarse en menos de 1 minuto y no requiere

hacer preguntas especiales al paciente. Evalúa 5 ítems

(desorientación, comportamiento inadecuado, lenguaje

inadecuado, presencia de alucinaciones y retardo psico-

motor). Su uso ha sido menos amplio, pero es más sencillo

(24).

Modelos de predicción clínica

Existen diversos modelos de predicción clínica desarro-

llados en distintos contextos. Estos modelos son útiles para

focalizar los esfuerzos e implementar medidas preven-

tivas y monitorizar a los AM de riesgo, realizando así un

diagnóstico y manejo oportuno. Un modelo de predicción

de riesgo de delirium prevalente, en AM hospitalizados

encontró que los factores determinantes en la presencia

de delirium fueron la edad y el deterioro funcional basal.

El puntaje de la fórmula, (83 x

edad (años

) - (43 x

Indice

Barthel

), se correlacionó con el riesgo de delirium (25).

Otro modelo de riesgo de delirium incidente, basado en

el Indice de Barthel y la relación BUN/Creatinina plasmá-

tica como marcador de deshidratación (26), sugirió que

aquellos individuos de mayor edad, aquellos con deterioro

cognitivo o funcional previo y los que ingresan deshidra-

tados son quienes tienen mayor probabilidad de desarro-

llar delirium durante la hospitalización.

ESTUDIO DE LA CAUSA

El delirium puede ser la primera manifestación de una

enfermedad aguda potencialmente grave, incluso antes de

la fiebre, taquicardia, taquipnea o hipoxia. En la evaluación

inicial en el servicio de urgencia se debe asegurar el ABC: vía

aérea, respiración y circulación adecuados. Se deben obtener

los signos vitales incluyendo oximetría, hemodinamia,

glicemia capilar y temperatura (5).

Se requiere una anamnesis, examen físico y neuroló-

gico completos, dirigidos a factores predisponentes y

precipitantes (5,18,27), (Tabla 1). En la historia es muy

importante recoger el estado basal del paciente, conocer

su funcionalidad previa, si existe historia de deterioro

cognitivo o psiquiátrico, así como el detalle del momento

cuando se notó el cambio o alteración de conciencia

[REV. MED. CLIN. CONDES - 2017; 28(2) 301-310]