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raciones del sueño en esta población.
No obstante el importante caudal de información existente,
en la actualidad el empleo de estudios de la vía serotoni-
nérgica está restringido a actividades de investigación en
pacientes con EP.
b) Estudio de la inervación colinérgica:
Existen dos
vías fundamentales de inervación colinérgica cerebral,
el sistema del núcleo basalis de Meynert, que inerva
fundamentalmente a la corteza cerebral y el derivado
del núcleo pedúnculo pontino (PPN) en el troncoencé-
falo, que entrega la inervación colinérgica predominante
a los ganglios basales, tálamo, cerebelo y médula espinal.
Ambos sistemas degeneran en pacientes con EP(62,63).
La disfunción de las vías de neurotransmisión colinérgica
cerebral han sido implicadas en pacientes con EP en las
manifestaciones motoras, especialmente temblor y altera-
ción de la marcha, complicaciones motoras, como discine-
sias y en manifestaciones no motoras tales como: trastorno
conductual del sueño REM, pérdida del olfato y trastornos
cognitivos y demencia (64). Los 2 trazadores de PET más
usados son los análogos de acetilcolina [11C] metil-4-pi-
peridil acetato ([11C]MP4A) y [11C]metil-4-piperidinil
propionato ([11C]PMP)(49,62,65). Ambos son metabo-
lizados por la enzima acetilcolinesterasa (AChE) y por lo
tanto reflejan la distribución de esta enzima. AChE se ha
demostrado como un buen marcador de las vías colinér-
gicas cerebrales (62, 66).
La evaluación de la actividad de la acetilcolinesterasa
mediante PET (AChE-PET) ha mostrado que la denerva-
ción de las vías relacionadas al sistema núcleos
basalis
de
Meynert-corteza cerebral se asocia con alteraciones cogni-
tivas y demencia, mientras que el daño de las vías del PPN se
asocian fundamentalmente a alteración de la marcha y tras-
torno conductual del REM(25). Los estudios por AChE-PET
han demostrado asociación entre denervación colinérgica y
severidad de síntomas depresivos, así como entre hipoacti-
vidad colinérgica límbica y cortical con menor capacidad de
detección de olores (hiposmia)
3) Estudio de la activación microglial
La presencia de inflamación es un fenómeno común a la
inmensa mayoría de las enfermedades que afectan al sistema
nervioso central. Esto también es válido para las enferme-
dades neurodegenerativas y en particular a la EP(67). Se ha
dividido el estudio de la inflamación mediante neuroimá-
genes funcionales, según los mecanismos principales invo-
lucrados:
a.
Activación de las células inmunocompetentes del sistema
nervioso central.
b.
Alteración de la barrera hematoencefálica.
c.
Infiltración del Sistema nervioso central por células
inmunes circulantes.
d.
Consecuencias patológicas de la neuroinflamación
(desmielinización y muerte celular).
De todos los ligandos disponibles para el estudio de la
neuroinflamación, los más estudiados en EP son los rela-
cionados a la proteína translocadora (TSPO), un marcador
de membrana mitocondrial con mínima expresión en
cerebro normal, pero que se expresa de modo abundante
en microglia activada, por lo que permite evaluar esta vía
de neuroinflamación (68). El radioligando más usado para
este fin es 11 C-PK11195 PET, aunque en la actualidad
existe una amplia variedad de marcadores disponibles. En
el estudio de pacientes con EP, se ha demostrado activa-
ción microglial desde etapas tempranas de la enfermedad,
tanto a nivel cortical, como en núcleos profundos (69). No
existe clara relación entre el nivel de actividad microglial
y el grado de avance motor de la EP, mientras que alguna
relación existiría con el compromiso cognitivo, asociado a
las etapas más avanzadas de la enfermedad (40).
4) Estudio del metabolismo cerebral de la
glucosa (18F-FDG)
A nivel del sistema nervioso central, la captación de glucosa
parece depender de la actividad sináptica de cada región y
aparentemente es reflejo de la captación de 18F-FDG por
los astrocitos cercanos a las neuronas. En EP, se ha plan-
teado que la disminución de las aferencias dopaminérgicas
podría desencadenar un aumento de la actividad sináptica
a nivel estriatal (70).
Los hallazgos característicos descritos con FDG en EP son
hiperactividad de los ganglios basales y tálamo en espe-
cial en el lado contra lateral al hemicuerpo más afectado.
Este patrón es inverso al observado en el envejecimiento
normal, en el cual se reduce característicamente la capta-
ción de FDG en estos territorios(71). También se observa la
presencia de alteraciones a nivel cortical con un aumento
de la captación en la corteza premotora contralateral al
lado más afecto, incluso precediendo al inicio de los
síntomas (72).
Las diferencias demostradas mediante FDG permiten
discriminar entre sujetos normales, portadores de EP y
especialmente entre EP y parkinsonismos atípicos (73).
Sin embargo, existe variabilidad a nivel individual, por
lo que los mejores resultados se obtienen al comparar
grupos de pacientes. El uso de análisis de componente
principal ha permitido obtener un patrón metabólico
característico que puede observarse incluso desde etapas
[REV. MED. CLIN. CONDES - 2016; 27(3) 380-391]