Previous Page  18 / 176 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 18 / 176 Next Page
Page Background

662

decrease the risk of dehydration and hypoglycemia from

prolonged fasting, and minimize the risk of aspiration of

gastric contents.

The cardiac patient undergoing non-cardiac surgery has

higher perioperative morbidity and mortality compared

to the general population; here the anesthetic evaluation

is key in the reduction of perioperative risk, since our

decision to perform additional studies, management and

specific interventions will depend on the outcome in this

subgroup of patients.

Surgical “prehabilitation” and “frialty” are emerging

concepts that include preoperative physical, nutritional

and psychological optimization, to improve postoperative

recovery process, instead of the more traditional

approaches, that target the postoperative period for

“rehabilitation”.

Key words: Routine diagnostic tests, preoperative fasting,

cardiovascular evaluation, prehabilitation, frialty.

INTRODUCCIÓN

Los cambios radicales de la medicina en las últimas décadas

han traído consigo cambios sustantivos en las especialidades.

Los avances tecnológicos y científicos permiten actualmente

llevar a cabo intervenciones y procedimientos que antes no

se resolvían por medio de la cirugía o se declaraban fuera del

alcance terapéutico.

La evaluación preoperatoria ha cobrado relevancia en la

última década, principalmente debido a los siguientes

hechos (1):

1. El aumento de pacientes añosos

2. El aumento de la cirugía ambulatoria

3. El desarrollo de tecnología, que permite realizar procedi-

mientos diagnósticos y terapéuticos fuera de pabellón, que

requieren sedación o anestesia

4. Cirugías muy complejas y de larga duración, en pacientes

comprometidos

5. La necesidad de contención de costos

El objetivo de este artículo es revisar aquellos tópicos de la

evaluación preoperatoria, que tienen mayor impacto en el

outcome

de los pacientes sometidos a cirugía electiva. Se

verán conceptos modernos, como prehabilitación, fragi-

lidad y el reciente consenso en evaluación preoperatoria del

paciente cardiópata sometido a cirugía no cardíaca.

La evaluación preanestésica es responsabilidad del anes-

tesiólogo y considera información de múltiples fuentes,

como historia clínica, entrevista, registros, examen físico y

exámenes.

Permite, entre otros objetivos, conocer los antecedentes

del paciente, identificar factores de riesgo modificables y

así desarrollar un plan anestésico en relación a los hallazgos

para lograr una disminución en la morbimortalidad perio-

peratoria. De hecho, el principal objetivo de evalua-

ción preoperatoria es la reducción de la morbimortalidad

asociada, pero además busca educar, mejorar la satisfac-

ción y reducir la ansiedad del paciente; evitar retrasos o

suspensiones innecesarias; coordinar interconsultas en caso

que el paciente requiera estudios adicionales; y obtener un

consentimiento informado firmado por el paciente.

En la literatura, hay innumerables artículos que muestran

que una adecuada evaluación preoperatoria incide en una

disminución en los costos, una menor tasa de suspensiones

de la cirugía y una disminución en los días de hospitaliza-

ción postoperatoria (2,3).

La Sociedad Americana de Anestesiología (ASA), en su última

puesta al día del año 2012 (4), establece que el momento

para realizar la visita preanestésica depende de la condición

médica del paciente y del grado de invasividad del proce-

dimiento: en pacientes de alto riesgo, así como en cirugía

mayor, sugiere que la evaluación preoperatoria se realice

con varios días de anticipación a la cirugía. Por el contrario,

en cirugía ambulatoria y en pacientes de bajo riesgo, la

entrevista se puede realizar el mismo día de la interven-

ción. Los cuestionarios son una herramienta efectiva para

obtener información básica en pacientes ambulatorios; son

completados por el paciente en la consulta o bien en su casa

y luego enviados por correo. Éstos pueden ser una fuente

adicional de información y pueden hacer más eficiente la

evaluación preoperatoria, ya que reducen el tiempo inver-

tido en realizar preguntas básicas, sin embargo, no reem-

plazan la entrevista médico–paciente (5).

Estudios recientes muestran que en determinado grupo de

pacientes una evaluación preoperatoria realizada con anti-

cipación en la consulta, por un anestesiólogo, reduce la

morbimortalidad (6).

La entrevista con el paciente es la herramienta más efec-

tiva de evaluación preoperatoria y es la primera aproxi-

mación del anestesiólogo al paciente. Ésta debe enfocarse

en detectar comorbilidad no diagnosticada que pueda

aumentar el riesgo perioperatorio, alergias, antecedentes

médicos y quirúrgicos, uso de medicamentos y hábitos

como tabaco o alcohol.

Estas recomendaciones también establecen que el examen

físico debe incluir al menos: peso y talla, signos vitales,

evaluación de la vía aérea, auscultación pulmonar, examen

[REV. MED. CLIN. CONDES - 2017; 28(5) 661-670]